Los Himnos Nacionales comenzaron a surgir cuando en el mundo sucedían situaciones como la unificación de los países o el
surgimiento de Estados-Nación como Imperios, con el fin de lograr una demostración de unidad nacional y la conformación de
símbolos patrios, junto con el establecimiento de otros símbolos como una Bandera, y un escudo como emblemas de distinción.
Bajo esta tendencia, México no fue la excepción.
En 1821, José Torrescano presentó una primera composición del Himno Nacional, sin embargo, no tuvo la completa aceptación
por parte de la Nación Mexicana.
En el año de 1849 la Academia de San Juan de Letrán lanza una Convocatoria, con el objeto de adquirir una letra adecuada
para el himno que representaría a los mexicanos, sobre todo al exterior. En dicha convocatoria, se recibieron treinta composiciones,
de las cuales se eligieron dos: la del compositor estadounidense Andrew Davis Bradburn, y la del poeta mexicano Félix María
Escalante, la cual fue musicalizada por el austriaco Henry Herz, ésta última fue elegida para ser presentada en Guadalajara
en noviembre de 1950.
Tiempo después, un poeta cubano, Juan Miguel Lozada y el compositor Karl Bochsa, crean un nuevo himno nacional, sin embrago,
tampoco trascendió.
Desde 1850, se realizan otros intentos para lograr que México tuviera un himno nacional como la propuesta del compositor
italiano Antonio Barilli, la del húngaro Max Maretzek, y la de otro italiano Ignacio Pellegrini. Dichas propuestas fueron
todas presentadas, pero sin mayor relevancia.
Continuando con el deseo insistente de llegar a tener un himno representativo, en el año de 1853, el presidente Antonio
López de Santa Anna, por conducto del Ministro de Fomento, Colonización, Industria y Comercio, Miguel Lerdo de Tejada, lanza
otra convocatoria con el fin de adoptar un canto que fuese constante y patriótico.
De las 26 composiciones presentadas se eligió una como ganadora, la del poeta originario de San Luis Potosí, Francisco
González Bocanegra, sin embargo, ahora el problema resultaba ser la música que se adaptaría a dicha letra. A sobre cerrado,
se envió la composición de la música del Himno, solamente con unas iniciales, J.N. Jaime Nunó, un músico catalán, fue el autor,
y por primera vez se cantó el 15 de septiembre de 1854, en el Teatro Santa Anna.
Tiempo después surgen una serie de luchas entre el sector liberal y el conservador, por lo que se decide que se relegará
todo lo concerniente al Presidente Santa Anna, por lo que el himno deja de cantarse, hasta 1862 cuando el Ejército de Oriente
lucha contra los franceses en Puebla.
En 1943 el Himno Nacional Mexicano se hace oficial, bajo el decreto presidencial de Manuel Ávila Camacho, a través del
Diario Oficial de la Federación.
Finalmente, en 1984 bajo la presidencia de Miguel de la Madrid Hurtado, se publica la Ley sobre la Bandera, el Escudo e
Himno Nacional donde se especifica el uso y características de los Símbolos Patrios.